Durante el emotivo lanzamiento de su nuevo documental, Karol G sorprendió al público con una sentida dedicatoria a su entrenadora vocal, Mirabay, a quien le atribuyó no solo su formación artística, sino también su fortaleza personal. Frente a los asistentes, la artista recordó los exigentes inicios de su carrera, cuando las jornadas de entrenamiento comenzaban a las cinco de la mañana y combinaban ejercicios vocales con subidas al cerro del Volador en Medellín.

Con palabras llenas de admiración y agradecimiento, la intérprete de Amargura reconoció que las lecciones de su mentora iban más allá de la técnica. “Me trabajaste el cerebro más que la voz”, confesó. Según Karol, fue Mirabay quien le dio las herramientas para enfrentar la crudeza del mundo artístico y no rendirse ante quienes desalentaban sus sueños. “Cuando uno tiene una idea y te dicen que no, hay que tener la mente muy fuerte para seguir”, aseguró.

En uno de los pasajes más inspiradores de su discurso, Karol G recordó el día en que le confesó a su profesora que quería ser la número uno de Medellín. La respuesta de Mirabay fue elevar el desafío, citó a su alumna media hora más temprano y la llevó de nuevo a la cima del cerro. Allí, con la ciudad a sus pies, le lanzó una pregunta que marcaría su camino: “¿De verdad solo quieres ser la más dura de Medellín?”. Para Karol, ese momento expandió sus sueños y su ambición.

El homenaje cerró con una frase cargada de emoción: “Te amo, Mira. Lo duro que fuiste conmigo me enseñó”. Así, la cantante no solo rindió tributo a una figura clave en su formación, sino que también dejó claro que el éxito no se construye solo con talento, sino con disciplina, mentalidad y las personas correctas que empujan a soñar más allá.