En los últimos días, las redes sociales se llenaron de mensajes alarmantes sobre Annabelle, la famosa muñeca maldita del museo de los Warren. Algunos medios y creadores de contenido afirmaron que había escapado de su urna, lo que generó miles de reacciones, memes e incluso teorías que la relacionaban con desastres recientes.

Sin embargo, Tony Spera, quien cuida actualmente del museo y es yerno de Lorraine Warren, negó completamente esta historia. Aclaró que Annabelle nunca estuvo fuera de control y que durante cada traslado es protegida con rituales religiosos, agua bendita y la vigilancia de un sacerdote. También aseguró que su vitrina permanece cerrada y bendecida.

Aunque el rumor resultó ser falso, la historia demuestra cómo leyendas urbanas como la de Annabelle siguen generando interés, miedo y curiosidad en todo el mundo. La muñeca sigue guardada bajo llave, pero su fama, al parecer, nunca descansa.