El conductor radial, Álvaro Mora, no se guardó nada y reaccionó con dureza ante la polémica generada por la acusación de xenofobia que el futbolista venezolano Miguel Navarro hizo contra el paraguayo Damián Bobadilla. En su programa “Rompiendo las Horas”, Mora cuestionó la actitud de los jugadores actuales y afirmó que el fútbol se está volviendo demasiado sensible. “¿Desde cuándo se volvieron tan maricones los jugadores? ¡Déjense de joder! Dentro de poco habrá que cerrar las canchas porque todos se ofenden por todo”, lanzó, visiblemente molesto.
Para el comunicador, los cruces verbales y las calenturas en la cancha son parte natural del deporte. “En el fútbol se juega fuerte, se habla fuerte y se termina ahí. Si te molesta, hablás con tu rival y lo arreglás después del partido”, señaló. Criticó la tendencia de llevar cada roce o insulto a instancias públicas o judiciales, y lamentó que “ya no se puede ni levantar la voz” sin que alguien se sienta agraviado.
Mora también recordó que los jugadores paraguayos han recibido insultos similares por años y, según él, nunca armaron tanto escándalo. “A nosotros nos gritaron de todo: paraguayo muerto de hambre, albañil, lo que sea. Y nadie hizo show. Es parte del juego”, dijo. Su postura, aunque polémica, abrió un nuevo debate. ¿Se están perdiendo los códigos del fútbol o es hora de poner límites claros al lenguaje dentro de la cancha?